Celaya.- A unas horas para la llegada del tradicional Día de Muertos, en el Hospital General de Celaya recordaron con una emotiva ceremonia a once donadores de órganos que a lo largo del último año permitieron dar vida a varias personas más. Sus familiares y receptores estuvieron presentes.
Entre los homenajeados se encuentran cuatro menores de edad, quienes por diferentes circunstancias fallecieron en los últimos meses y sus familias, pese a la tristeza que les embargaba, decidieron donar sus órganos porque así una parte de ellos seguirá con vida, y permitirá ayudar a otras personas con problemas de salud para seguir adelante.
ÚNETE A NUESTRO CANAL DE WHATSAPP EN ESTA LIGA https://whatsapp.com/channel/0029Va6evSkGk1Ftej78ks0B
Te podría interesar
“Lo pensamos porque en el momento no es fácil, pero sabíamos que mediante la donación podríamos salvar la vida a otros niños. Lo que nos motivó a aceptar la donación es que mi hijo permanece vivo a través de otros niños, porque la donación nos ayudó a aceptar la pérdida de mi hijo porque un pedacito de él sigue vivo.
“Cuando nosotros decidimos donar sus órganos significó para nosotros el que le de vida a otros niños y eso para mi significa que sigue vivo. Yo les recomiendo a las personas para que donen sus órganos y así salven más vidas”, dijo Lizbeth Guadalupe Coria, mamá del niño Alexis Giovany Gervasio, quien tenía solo 16 años.
Para recordarles, se montó un panel con sus fotografías y una pequeña semblanza de cada uno de ellos. Al pie de las fotografías estuvieron sus familiares para recordarles, al tiempo en que soltaron decenas de globos blancos con la leyenda “¡Gracias!”
En el evento estuvo presente el director del Centro Estatal de Trasplantes, Rodrigo López Falconi, quien agradeció a las familias de los donadores por este acto de amor para permitir que sus seres queridos sigan vivos a través de otras personas y permitirles recuperarse de diversas enfermedades.
Pequeño de 7 años, estudiaba la primaria. Le gustaba mucho jugar a las canicas. Su mamá decidió donar pensando que si su pequeño ya no estaba con ella,, podría permanecer vivo en otros niños. “Eso me dio esperanza de que mi niño sigue vivo, aunque ya no está con nosotros”.
Trabajó en el mercado Morelos, era muy entusiasta y trabajado. A pesar de ser muy joven, era muy querido y adoraba a los niños. Era alegre, responsable y amable. Lo conocían como “el niño de la sonrisa”. Su familia decidió donar sus órganos porque él siempre decía que quería donar a las personas y darles otra oportunidad de vida a través de él.
Joven de 16 años, se caracterizaba por su pelo negro, lacio y rebelde. Era muy caritativo y le gustaba ayudar a los demás. Desde niño trabajó para ganar dinero por él mismo. Le encantaba andar en su moto y escuchar música. Su familia decidió donar sus órganos porque a él le gustaba mucho ayudar a las personas.
Fue un niño alegre, siempre tenía una sonrisa en todos lados sin importar la situación. Le gustaba mucho su trabajo ya que se trataba de cocinar y gracias a ello aprendió a hacer pizza. Salía en moto y le encantaba, era su pasatiempo favorito salir a rodar en su tiempo libre. Fue un niño muy alegre y risueño, por eso su familia decidió donar sus órganos para que alguien más tuviera la oportunidad de seguir adelante y contagiarse de su alegría para que su luz nunca se apague.
Se desempeñaba como gerente de ventas. Era muy apasionado de la vida, no existían obstáculos que no pudiera resolver. Era constante y determinado, lo que lo llevó a ser el mejor en su área. Se apasionaba con el fútbol. Su principal virtud era la puntualidad. Su familia decidió donar porque siempre han sido muy solidarios siguiendo el ejemplo de su padre, quisieron regalar vida a otras personas para que pudieran crecer y desarrollarse como lo hizo Juan Antonio.
Fue un ser humano puro y noble. Su pasión era el ciclismo, se dedicaba a la carpintería, amante de los perros. Su familia lo recuerda como el mejor amigo, hijo, hermano, cuñado que la vida les pudo dar. Decidieron donar sus órganos porque él dio lo mejor de sí para ayudar a quien lo necesitaba.
De oficio taquero. Era muy alegre y bromista. Siempre quería ayudar a las personas que lo necesitaban. Dio su vida por proteger a los niños y fue la razón de que su familia decidiera donar sus órganos, porque a él le gustaba ayudar a la gente y amaba mucho a su familia.
Estudiaba mercadotecnia y trabajaba de mesera. Le gustaba mucho la música, bailar y trabajar. Era una niña muy responsable e independiente, una hija ejemplar. Su familia decidió donar sus órganos para que no se fuera completamente y pudiera ayudar a quien lo necesitara.
Fue un hombre muy trabajador en el campo, una de las aficiones que más disfrutaba era el fútbol. Su familia decidió donar sus órganos para ayudar a que otras personas enfermas pudieran salvar su vida.
Era el menor de 9 hijos, muy sociable y le gustaban mucho las aventuras. Nunca se derrotaba en ninguna circunstancia. Fue muy alegre. Era conocido por su carpintería, por el fútbol y sus fotografías. Su familia decidió donar porque él siempre ayudó a todos en vida y quisieron seguir ese ejemplo tan noble que siempre tenía con los demás.
Originario de Salvatierra, se dedicaba a la reparación de calzado. Su pasión era el fútbol, aficionado de corazón al América. Sus hijos son Iván y Giovanny, ellos decidieron donar sus órganos al darse cuenta de la posibilidad de ayudar a muchas personas.