León-. Fue una tarde de alegría, de gritos eufóricos por la felicidad que el equipo León causó por haber ganado el título de La Confederación de Norteamérica, Centroamérica y el Caribe de Fútbol, miles de aficionados se dieron cita en el Noucamp para festejar el triunfo de La Fiera.
No importó el sol, ni el calor, ni el agobio, los aficionados llegaron desde temprano al estadio a esperar a los 11 jugadores que se trajeron el título de la Concachampions, así formaron parte del momento, de la historia que escribió el equipo León al ganarle 3-1 (marcador global) al equipo estadounidense de Los Ángeles FC.
Sobre la tribuna de la puerta 5 los hinchas de La Fiera ondearon sus banderas que se alzaron sobre un cielo azul sin nubes y el sol escondiéndose que ya se se dirigía al horizonte, padres y madres de familia asistieron con la playera del León puesta, traía a sus hijos pequeños, todavía en brazos, para infundirles el amor por los esmeraldas del León, así fue el festejo entre jugadores y afición, así se formó una comunión aficionado y jugador.
Los aficionados más eufóricos, aquellos que no se quedaron con las ganas de abrazar y hacerles saber el cariño y la emoción que sienten por los jugadores, burlaron la seguridad y la afición los vitoreó como otro jugador más, los guardias de seguridad los siguieron y al volver a las gradas gritaron como si de un gol se tratara.
“¡León! ¡León! ¡Leoooón!” resonó el eco en todo el estadio, en el concreto de la gradería que quedó vacía, pues no todos los accesos se abrieron. Los jugadores salieron con la copa de la Concacaf ganándose un pase a la Copa Mundial de Clubes de la FIFA.
Así en una tarde soleada el ofensivo equipo León festejó con los suyos un título y un nuevo capitulo en la historia del Club León.