Estudiar una licenciatura es una de las cosas por las que miles de jóvenes se esfuerzan y luchan incansablemente con la esperanza de en un futuro tener una mejor calidad de vida y al mismo tiempo contribuir a la sociedad, por ello, tras finalizar sus estudios, obtener su título universitario los hace sentirse increíblemente orgullosos.
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Sin embargo, no siempre los años de estudio terminan de la forma en la que uno quisiera, tal como le pasó a una joven guerrerense que por más de 4 años cursó una licenciatura de la que al final no le fue posible titularse, pues esta no existía de manera oficial.
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La joven, identificada por el nombre Halis Montero, compartió a través de su cuenta de TikTok la desafortunada historia de cómo, pese haber estudiado con dedicación y esmero para convertirse en maestra de educación especial, al final la propia escuela acabo con sueño, trabajo y esfuerzo.
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En su historia, Halis Montero narra que debido a que no contaba con los recursos para estudiar una licenciatura pidió apoyo a sus familiares, quienes la apoyaron siempre que estudiase para convertirse en enfermera o profesora, ella terminó decantándose por estudiar para ser maestra.
Así, la joven acudió a la Escuela Normal de Iguala Guerrero, donde se impartía la carreara de educación especial, la cual se enfoca en personas con discapacidad y niños en situación de vulnerabilidad.
Sus ganas por estudiar fueron tantas que cuando al llegar y presentarse la primera irregularidad no le dio importancia, pues de pronto, la carrera a la que ella se había inscrito desapareció y fue sustituida por otra denominada inclusión educativa, por lo que decidió seguir preparándose en esa carrera.
Luego de cuatro años, a cuatro meses de su titulación, volvieron a ocurrir irregularidades, pues le pidieron acreditar el idioma inglés en un par de semanas. A esto se sumó que cuando intento comenzar el trámite de titulación se topó con que "en la Secretaría me dijeron que la licenciatura era muy nueva, que hablara directo con mi Normal para saber si me darían el título".
"Fui a la Dirección de Profesiones para preguntar si la Normal tenía esta licenciatura registrada y me dijeron ‘no está, no existe’ resulta que no era oficial y las autoridades grandes no sabían que la escuela estaba ofreciendo estos estudios", agregó.
"Cuatro años me tuvieron estudiando a mí y a 300 personas en una licenciatura que no existía, que no estaba registrada, que no era oficial", reclamó la joven.
Y aunque tuvo la intención de denunciar a la escuela, desistió debido a que ella era la única de sus compañeros que tenía esa intención, ello pese a que al acudir a las autoridades estatales y municipales para pedir ayuda, ninguna accedieron a ayudar a la joven, diciéndole que eso lo tenía que arreglar con la Normal.
"Al final, a toda la generación nos dijeron que en junio o julio iban a tener actualizaciones sobre el caso", declaró la joven.
Profesores de la Normal descalifican a la joven
Luego de dar a conocer su historia de cómo estudió 4 años una licenciatura que no existía por lo que no pudo obtener ni su título, ni su cédula profesional, Halis Montero denunció que los profesores de la Normal han comenzado a descalificarla con los otros estudiantes, pidiéndoles que no le sigan el juego.
“Estoy vetada de mi escuela y muchos maestros hacen comentarios negativos hacia mis compañeros sobre que ‘no me sigan el juego’, pero yo no sé de qué juego hablan, porque para mí, estudiar, no es un juego”, compartió la joven.
Y agregó que ella no ha atacado a la universidad, pues señalo que “en mi juramento dije que defendería la educación y eso comienza con mi propia educación. Gracias por su solidaridad y apoyo, esperemos esto se resuelva”.
Aunque mandó un mensaje a las autoridades educativas responsables de que en la Normal se imparta una licenciatura que ni siquiera existe, “retírense de sus puestos laborales, la incompetencia no sirve en el país, solamente encarece la educación, que de por sí está por los suelos”, demandó.
Esta situación, reporta la joven, le ha causado muchos problemas, pues perdió su trabajo en la SEP por no contar con un título y cédula profesional a consecuencia de haber estudiado una licenciatura inexistente en una institución educativa pública en donde nadie se hace responsable de que muchos jóvenes hayan estudiado 4 años, pero al final no podrán titularse.
“Después de graduarme y gracias a la exigencia de las autoridades educativas del estado de Guanajuato, me enteré que mi licenciatura, la cual cursé durante cuatro años, no estaba registrada a nivel nacional, posteriormente descubrí que no había una clave de registro de carrera a nivel estatal”, informó la joven.
VGB