Culiacán, Sinaloa.— La mañana del jueves 16 de octubre un atentado armado cobró la vida de un elemento de Fuerzas Especiales de la Defensa Nacional, mientras otros dos resultaron lesionados, en la sindicatura de Tepuche, al norte de Culiacán. Durante la agresión, una patrulla militar fue incendiada y de inmediato se implementó un amplio operativo de seguridad en la zona.
Según reportes locales, el enfrentamiento ocurrió cuando los efectivos militares, posiblemente en patrullaje o reconocimiento, fueron emboscados por un grupo de sujetos armados que los atacaron desde caminos vecinales cercanos al cerro de La Pista. La agresión fue calificada como de alto impacto por autoridades municipales.
El presidente municipal de Culiacán, Juan de Dios Gámez Mendívil, informó que el ataque “implica que aún hay presencia de civiles armados del crimen organizado” en la zona y confirmó que se puso en contacto con el síndico de Tepuche para coordinar apoyos a la población afectada.
Identidad del elemento caído y operativo militar
El militar fallecido fue identificado como el Mayor Jesús O. B., integrante de la unidad élite conocida como “Murciélagos” de las Fuerzas Especiales del Ejército Mexicano. Hasta ahora, su identidad no ha sido confirmada por un comunicado oficial de la Sedena o Defensa. Medios locales señalan que el Mayor desempeñaba funciones de alto riesgo, liderando rastreos y operaciones directas contra células delictivas en la región.
Hasta el momento no se han reportado capturas ni bajas entre los agresores. El operativo desplegado permanece activo en comunidades cercanas, con patrullajes terrestres, vigilancia aérea y presencia militar en zonas estratégicas.
Los “Murciélagos” y la violencia persistente en Sinaloa
El sobrenombre “Murciélagos” se atribuye a integrantes del Cuerpo de Fuerzas Especiales (CFE) del Ejército Mexicano, anteriormente conocido como GAFE. Esta unidad se especializa en operar de noche, con tácticas de infiltración, reconocimiento y operaciones encubiertas. Sus integrantes pasan rigurosos procesos de selección física, psicológica y operativa, incluyendo combate urbano, paracaidismo, sobrevivienda e inteligencia táctica.
Sinaloa ha vivido un recrudecimiento de violencia desde 2024, tras la detención internacional de Ismael “El Mayo” Zambada, lo que intensificó conflictos internos del Cártel de Sinaloa. La fragmentación entre grupos rivales ha generado ajustes territoriales y enfrentamientos armados. Culiacán y sus zonas rurales, como Tepuche y Navolato, son escenario frecuente de emboscadas, bloqueos y ataques contra fuerzas de seguridad. El asesinato del Mayor Jesús O. B. se da en este contexto de alta tensión, donde la presencia militar se mantiene, pero los grupos armados continúan operando con capacidad de emboscada.
