Cuando el clima comienza a enfriar y el olor a pan de muerto invade las calles, nada se antoja más que una buena sopa caliente. La gastronomía mexicana tiene una enorme variedad de caldos, cremas y sopas tradicionales que no solo abrigan el cuerpo, sino también el espíritu.
Gracias al ambiente gélido y la gran variedad de sabores en la cocina mexicana, es como a continuación te presentamos tres opciones irresistibles para disfrutar de un platillo caliente durante esta temporada de otoño.
TE RECOMENDAMOS LEER: ¿Cuántos millones de pesos hizo 'Soy Frankelda' en su debut? Te contamos dónde si hay boletos
Te podría interesar
Sopa de elote: dulzura y nostalgia en cada cuchara
Con una textura cremosa y suave, así como un toque natural de dulzura, la sopa de elote es una de las favoritas dentro de la cocina casera mexicana. Es preparada con granos de maíz frescos, leche y un toque de mantequilla, dándole un sabor reconfortante que evoca los sabores del campo.
Algunas versiones modernas incluyen queso Cotija rallado o chile poblano asado para darle un matiz más profundo. Generalmente, suele servirse con totopos o con pan artesanal, ideal para acompañar una tarde lluviosa.
Sopa de tortilla: un clásico que nunca pasa de moda
Conocida popularmente como la sopa azteca, este plato es un ícono de la gastronomía mexicana. Su base de jitomate, chile pasilla y epazote crea un caldo intenso y aromático.
Suele acompañarse con tiras de tortilla frita, aguacate, queso fresco y crema. Cada cucharada combina texturas y sabores que hacen de esta sopa una experiencia completa. En muchas casas y restaurantes, se prepara especialmente en los meses fríos por su carácter reconfortante.
TE RECOMENDAMOS LEER: Extorsión y robo en la casa de Susana Zabaleta: qué sucedió y qué dijo la actriz
Caldo tlalpeño: el remedio perfecto para el frío (y el alma)
Originario de Tlalpan, este platillo es sinónimo de energía y bienestar. Con base de pollo, garbanzos, zanahorias, papa y chipotle, el tlalpeño es una bomba de sabor que reconforta hasta los días más grises.
Usualmente se sirve bien caliente, con limón y aguacate al gusto. Muchos lo consideran el “antídoto natural” para los resfriados y el mal de amores, una sopa que calienta el corazón con cada sorbo.
ÚNETE A NUESTRO CANAL DE WHATSAPP. EL PODER DE LA INFORMACIÓN EN LA PALMA DE TU MANO
SÍGUENOS EN EL SHOWCASE DE GOOGLE NEWS
El otoño es la temporada ideal para redescubrir estas recetas tradicionales y compartirlas con familia o amigos. Ya sea el dulzor del elote, el picor del pasilla o el ahumado del chipotle, cada plato guarda una historia mexicana que se transmite de generación en generación.
