VERACRUZ, VER. - Con la ropa mojada y la sonrisa de felicidad, Mario Domínguez sostiene dos robalos en las manos, un pescado altamente valorado en el Mercado de Pescadería de la ciudad de Veracruz. Recuerda que con esta captura obtuvo 2 mil pesos, pero esa alegría solo se ve reflejada en la foto que guardó como un recuerdo.
Este 6 de septiembre el pescador cumple 8 días sin trabajar, luego de que la Administración del Sistema Portuario Nacional (Asipona) de Veracruz cerró el acceso a la zona de Playa Norte, donde tenían su lugar de pesca y herramientas, al igual que 170 pescadores más de tres cooperativas distintas.
Te podría interesar
El día que la Asipona cerró dicho acceso construyó una barda de concreto durante la madrugada, sin ofrecer ninguna explicación a los pescadores que, como Mario, fue desplazado de una noche a otra del sitio que ocupó por 20 años.
En un comunicado que la Asipona envió durante la tarde de ese miércoles, señaló que el cierre era parte de las nuevas disposiciones de las zonas portuarias del país y que serían reubicados. La nueva entrada al lugar sería por la ruta escénica al fuerte de San Juan de Ulúa, 1 kilómetros más retirado de la antigua entrada.
Te podría interesar
“Nos dejaron sin trabajar todos los pescadores que vivimos de eso, más de 40 familias en la cooperativa. Yo creo que ellos no previeron el impacto que iba a generar el dejar de trabajar para nosotros, porque estamos atendiendo el sacar las lanchas y nuestros equipos de Playa Norte y, desgraciadamente, hasta los perros se quedaron sin comer”, dice Mario.
A los pescadores no les quedó más que acatar las órdenes de cambiarse de lugar para seguir con su trabajo, pero afirman que este cambió traerá como consecuencias más gasto en gasolina, pues deben de recorrer una distancia mucho más larga para llegar hasta el nuevo muelle; además, el trayecto para navegar se extenderá al menos 4 kilómetros más.
Joaquín Sosa Herrera, dirigente de la Cooperativa Triunfo Unido, de la que forma parte Mario y otros 40 pescadores, indica que con este cambio tendrán que gastar más del doble de gasolina al día para sus lanchas, anteriormente se gastaban solo 5 litros, esto impacta en los bolsillos de las familias.
Sosa Herrera dice que el trabajo de los pescadores es como una moneda al aire, pues hay temporadas buenas en que pueden ganar hasta 2 mil pesos en un día, pero hay otras en las que apenas y logran ganar 300 pesos, a lo que se le descuentan los gastos por combustibles e insumos.
Otro de los daños colaterales es que conforme avanzan los trabajos de ampliación del puerto de Veracruz, se reducen los espacios para que puedan pescar. La mayoría de los agremiados a la Cooperativa Triunfo Unido se dedican a la captura de pulpo, el arrecife más cercano que tienen para hacer esta actividad es el de La Gallega; no obstante, en ese punto también hay pescadores de otras cooperativas que se dedican a capturar esta especie, por lo que temen que la depredación sea mayor.
“Ahorita le vamos a echar montón al arrecife de La Gallega, es una depredación de la más grande que puede haber en el puerto de Veracruz, las autoridades están conscientes de esto, de la depredación. Hay más pulperos que pulpos en el arrecife de La Gallega, tenemos que ir a pescar al (arrecife) de La Negadita, a La Blanquilla, La Verde y para hacer eso tenemos necesidad de una lancha un buen motor”, agrega Salvador López Domínguez, otro miembro de la cooperativa.
Historia de desplazamiento de pescadores
Casi la mitad de los agremiados a la Cooperativa Triunfo Unido son adultos mayores que tienen como único oficio la pesca y que ahora viven de lo que ahorraron o de la Pensión del Bienestar. Personas como Salvador y Mario comenzaron en este oficio a la edad de 6 años. Durante todo ese tiempo han visto como poco a poco son desplazados ante los nuevos proyectos de ampliación del puerto.
“Nos han ido replegando desde hace 30 años. Empezamos a trabajar en las escolleras del lado sur, de lo que es el muelle viejo y de ahí nos fueron recorriendo. Se hizo una ampliación y los que tuvimos la oportunidad nos brincamos hacia la zona de la colonia Playa Linda, para seguir trabajando, en los bajos de Punta Gorda”, cuenta Mario.
En 1994 la entonces Administración Portuaria Integral de Veracruz (Apiver) entró en operación con el carácter de entidad paraestatal de la Administración Pública Federal. En ese mismo año se elaboró un programa que se llamó Programa Maestro de Desarrollo, que consistió en trabajos de ampliación y modernización del recinto portuario, donde se ampliaron 116 hectáreas, según información de la Asipona.
Para finales de 1999, el programa se volvió a actualizar contemplando un proyecto de desarrollo para el puerto en un plazo marcado entre el 2000 y 2010, fue en el 2001 que nació la Cooperativa Triunfo Unido, debido a que muchos no formaban parte de una y tenían incertidumbres de lo que pasaría con ellos al realizarse estos trabajos.
No obstante, para marzo del 2016 el cierre de la Playa Norte fue definitivo, lo que ocasionó que muchos prestadores de servicios y pescadores se quedaran sin empleo, aunque Joaquín comenta que algunos palaperos recibieron una indemnización por retirarse de la zona, ellos aún la esperan.
“La Apiver se comprometió en el 2016 que de inmediato se pusiera la primera piedra de esta mega obra, se le estaría indemnizando al pescador, como lo que acababa de pasar con los compañeros palaperos, cosa que no fue así. Desafortunadamente nada más fue verbal y hasta la fecha no la han cumplido”, asevera Joaquín Sosa.
Durante el tiempo que no pudieron laborar por los trabajos de ampliación, la Asipona, antes Apiver, les dio trabajos y cursos para reubicar los corales, además de emplearlos en la limpieza de colonias cercanas donde debido a los trabajos llegaba polvo de las obras. Al día ganaban 400 pesos, pero esos trabajos solo fueron durante un periodo corto de menos de un año, por lo que después volvieron a retomar el trabajo de la pesca.
Los acuerdos
Hasta el momento, durante la administración de Romel Eduard Ledezma Abaroa al frente de la Dirección General de la Asipona, quien cumple 3 años en el puesto, aún no ven avances sobre la indemnización que les prometieron, algunos miembros de otras cooperativas pesqueras exigieron la destitución del director ante estos problemas.
Sin embargo, Sosa Herrera menciona que su cooperativa llegó a un acuerdo con el funcionario, en el que acordaron pasar su equipo al nuevo muelle con la condición de que exista un lugar para que los pulperos puedan realizar su actividad.
También que puedan obtener un apoyo por parte de la Asipona para sobrellevar los días en los que no van a trabajar y que la administración cumpla con la indemnización que les prometieron, pues saben que en algunos años tendrán que salir definitivamente de esa zona y se quedarán sin trabajo.
MB