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Torre Pediátrica de Veracruz: Bomba de tiempo que le explotó a Cuitláhuac

La Torre Pediátrica tiene un historial negro de anomalías que se heredaron de antiguas administraciones y que no cesaron durante estos 5 años de administración del morenista Cuitláhuac García

Torre Pediátrica: bomba de tiempo que explotó en gobierno de Morena.Créditos: LSR Veracruz
Escrito en VERACRUZ el

VERACRUZ, VER.- “No solo es el elevador. A veces trabajamos sin agua, sin climas, con apagones y con fugas”, dice Carlos, trabajador de la Torre Pediátrica en la ciudad de Veracruz. El enfermero tiene más de un año de laborar en las instalaciones y asegura que hacerlo en esas condiciones es difícil e inseguro, para el personal y para los pacientes.

En esta última semana el Hospital Pediátrico, ubicada en la avenida 20 de noviembre, estuvo en el ojo del huracán por el colapso de un elevador con cuatro personas adentro, el segundo incidente similar en menos de un mes.

El escándalo llegó en medio de la queja de empleados de la clínica por diversas deficiencias en los servicios, relacionadas con la falta de mantenimiento, y llevó a la destitución del director del Hospital Regional de Alta Especialidad de Veracruz, Jesús Daniel Uribe, encargado de este inmueble.

El primer accidente con el elevador ocurrió el 17 de abril, cuando 3 enfermeras resultaron lesionadas luego de que cayó 3 pisos. Pese a que el hecho fue negado por el secretario de Salud, Gerardo Díaz Morales, las trabajadoras lo desmintieron en redes sociales, donde expusieron sus lesiones. 

El segundo accidente ocurrió el fin de semana de este 7 de mayo, de nueva cuenta el elevador cayó con 4 personas a bordo. El hecho fue confirmado por el gobernador Cuitláhuac García Jiménez, quien en conferencia dijo que se enteró por lo reportado en medios y puso un ultimátum al hasta ese entonces director del Hospital Regional.

El gobernador informó que se había presentado una denuncia en contra de la empresa OTIS L. S.A. de C.V., ya que es la responsable de los aparatos y, presuntamente, desatendió la solicitud de brindar mantenimiento en dos ocasiones.

En el área de urgencias se ha inundado en varias ocasiones o empieza a salir agua en las tazas de baño cuando llueve mucho y pues es un olor a excremento. Nos hemos quedado también sin agua. Y sí, tiene muchas consecuencias, pues tres días después de que pasa, una gran cantidad de niños salen con infecciones gastrointestinales, con diarrea, fiebre”, agrega Carlos.

El joven asegura que en las tres ocasiones tardó 12 horas sin que se restableciera el servicio de agua, aunque pareciera poco tiempo, por el tamaño del hospital se vuelve una situación insostenible para los pacientes y trabajadores, quienes tenían que acudir al Hospital Regional de Alta Especialidad, que se encuentra al lado, para hacer sus necesidades y los que no podían debían de hacer en esas condiciones.

Recorrido en cada piso de la Torre Pediátrica

Rosa, otra de las trabajadoras de la Torre Pediátrica, agrega que las fallas persisten en casi todos los pisos, aunque no pueden negar que cada que se reporta un desperfecto acuden a repararlo, dice, que es como un “cuento de nunca acabar”, ya que el deterioro en algunos lugares es muy obvio.

La Torre Pediátrica fue planeada con 10 pisos; sin embargo, dos de ellos fueron eliminados porque la Secretaría de Protección Civil del Estado de Veracruz dictaminó que los pisos 9, 10 y el helipuerto debían de ser demolidos, ya que el edificio no era estable.

De acuerdo con Rosa, la planta baja del área de urgencias no se encuentra completamente habilitada, ya que dos salas fueron utilizadas como áreas covid durante la pandemia de la covid-19, en el 2020 al 2022. Al bajar los contagios esos lugares fueron utilizados como bodegas para guardar camas en mal estado, además de que se mina el agua y el techo corre riesgo de caerse.

En el primer piso se encuentra la consulta externa y la sala de tomografía, donde se atienden pacientes de la Torre Pediátrica y el Hospital Regional, en esta área solo hay detalles de pintura y repello.

En el segundo piso están los quirófanos que no funcionan, por lo que las operaciones son realizadas en el Hospital Regional. De acuerdo con lo que a Rosa le relatan los trabajadores con más años de antigüedad, ellos recuerdan que esa área se encontraba bien equipada y con todas las funciones; no obstante, desconocen por qué dejó de funcionar. En ese nivel también se encuentran los consultorios de oncología y hematología.

Para el tercer piso está la terapia intensiva pediátrica y la terapia intermedia pediátrica; esta última, solo la reactivan cuando alguna área está saturada. El cuarto nivel es donde deberían estar los recién nacidos y prematuros, pero también se encuentra cerrada y los trabajadores no tienen acceso al lugar. 

Mientras que en los demás pisos el problema recurrente es la falta de clima, que en tiempos de calor se agudiza, por esto los pacientes se ven con la necesidad de ingresar ventiladores personales para sobrellevar el calor.

“El problema del clima lo sufrimos como dos veces al mes, por lo menos. Hay veces que estamos bien en diciembre o enero, pero después llegan a tardar hasta 3 o 4 días sin clima. Trabajar así es complicado y más con todo lo que debemos portar”, dice Rosa.

¿Cuánto gasta en el mantenimiento de la Torre?

Ambos trabajadores coinciden que las instalaciones del hospital sí cuentan con mantenimiento, ya que cuando ocurre un desperfecto es reparado, pero también añaden que no es suficiente, pues cada que componen algo, surge un daño nuevo, lo que hace que el hospital no funcione correctamente.

Los contratos que son públicos en la Plataforma Nacional de Transparencia señalan que la Torre Pediátrica ha recibido mantenimiento en los climas, aunque no especifica la cantidad que se destinó al hospital infantil, el portal señala que del 1 de enero del 2022 al 31 de marzo se invirtió un total de 11,829,415.49 pesos (11 millones 829 mil 415.49) en trabajos de mantenimiento de climas en el Hospital Regional y la Torre Pediátrica.

Mientras que, en el caso del mantenimiento de los elevadores y equipos médicos, en la plataforma hay dos contratos que fueron realizados a la empresa ELEVADORES OTIS S. DE R.L. DE C.V., uno por adjudicación directa y el otro por licitación pública a cuanto menos 3 personas.

El contrato por mantenimiento de elevadores señala que la empresa prestó sus servicios a 10 hospitales de distintos municipios de abril a junio del 2022, incluyendo el Hospital Regional de Veracruz, sin especificar si la torre recibió mantenimiento, por un monto de 1,950,537.22 pesos (1 millón 950 mil 537 pesos).

El otro contrato que también fue otorgado a la empresa Elevadores OTIS, esta vez por los servicios de mantenimiento correctivo urgente por contingencia Covid-19 a equipos electromédicos y electromecánicos de la Red Estatal de Hospitales de Veracruz, fue realizado en abril del 2020, por un total de 1,346,594.12 pesos (1 millón 346 mil 594).  

Aunque en los contratos no especifican si en los trabajos de mantenimiento se incluye al hospital infantil, el gobernador del estado de Veracruz, Cuitláhuac García Jiménez, dijo en conferencia de prensa del lunes 9 de mayo que interpusieron una denuncia a la empresa ELEVADORES OTIS S. DE R.L. DE C.V., por los accidentes en la Torre, ya que es la encargada de darle mantenimiento a los elevadores del hospital.

Una bomba de tiempo

La Torre Pediátrica estuvo envuelta en polémicas desde el inició de su construcción, la primera piedra fue colocada en los últimos meses del gobierno del priista, Fidel Herrera Beltrán (2004-2010), para la llegada de Javier Duarte de Ochoa (2010-2016) se habían invertido 340,000, 000 de pesos (340 millones de pesos), pese a que en un inició se estipuló un presupuesto de 190 millones de pesos; sin embargo, el lugar seguía sin funcionar por una serie de anomalías con el constructor de la obra.

Después de que Javier Duarte dejó el cargo de gobernador, por ser acusado de diversas anomalías que cometió dentro de su administración, el lugar quedó en manos del panista Miguel Ángel Yunes Linares (2016-2018). Durante dos años de administración, anunció que se invertirían mil 300 millones de pesos al sector salud, de esta cantidad, 400 millones de pesos fueron utilizados para la reconstrucción de la torre.

En esos dos años también se demolieron los pisos 9 y 10, además del helipuerto por un dictamen de riesgo de la Secretaría de Protección Civil del Estado de Veracruz. También se detuvo al empresario constructor del edificio, César Augusto Morando Turrent. Fue acusado por fraude y en 2018 un amparo federal lo liberó de los cargos.

Antes de que el gobernador panista saliera del cargo inauguró el hospital. Pero no se salvó de las anomalías. Para la llegada del morenista Cuitláhuac García (2018-2024) informó que se investigaría la adquisición del equipo médico defectuoso adquirido durante el gobierno de Yunes Linares. 

La administración del morenista no se ha salvado de los señalamientos por las deficiencias de la torre, pues en los últimos 5 años la falta de medicamentos, las deficiencias en la infraestructura y los reclamos de las madres de niños con cáncer no pararon. Aunado a los accidentes de los empleados.

mb