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“Tener un crédito Infonavit es como estar en una cárcel con deuda perpetua”.

Mayra adquirió su crédito Infonavit para tener una casa en el puerto de Veracruz. A 13 años de lo que pensó sería el inicio de una vida cómoda, su deuda, en vez de bajar, subió. Cada mes abona 2 mil pesos por vivir en un fraccionamiento inhabitable. 

Escrito en VERACRUZ el

VERACRUZ, VER. - Para Mayra García Cortés, su crédito Infonavit es como estar en una cárcel donde tiene que pagar una cadena perpetua. Durante los últimos 13 años el monto de su deuda, en vez de bajar, subió. A eso, ella le suma los múltiples problemas que surgieron en su vivienda después que llegó a habitarla. La deuda que contrajo, que sería de 15 años, hoy ya no sabe cuánto más demorará en saldarla.

Mayra vive en el fraccionamiento Colonias de Santa Fe, en la zona norte de la ciudad de Veracruz. El 15 de junio del 2010 adquirió su crédito del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit). Para entonces la constructora encargada del proyecto inmobiliario, Casas Homex, ya tenía 5 años de haber comenzado el proyecto de viviendas de interés social en esa zona.

Con la ilusión de tener un patrimonio para sus hijos, Mayra no dudó en adquirir una vivienda en ese fraccionamiento el cual prometía a sus habitantes casas de nivel residencial con amplias recámaras, áreas verdes y todos los servicios.

Un crédito impagable

La madre soltera compró su vivienda de dos pisos, tres recámaras y con cochera por un monto de 480 mil pesos, debido a que su crédito no le alcanzaba para cubrir esa cantidad solo ocupó 180 mil pesos y el resto fueron ahorros que su papá le dio de su jubilación y con eso pudo hacerse de su casa.

“Yo del Infonavit ocupé 180 mil pesos, lo cual hoy en día ya es una cuenta de 250 mil que no baja. Ya tengo 13 años pagando la casa y no baja. Yo voy y pregunto al Infonavit y me dicen que si quiero liquidar la casa tendría que pagar 180 mil pesos, pero solo si lo hago en el momento, pero obviamente al no contar con ese dinero no puedo liquidar y voy pagando mensualmente. Cada año sé que incrementa el pago de Infonavit. Yo cada año creo que me están incrementando de 100 a 200 pesos de la cuota del pago, hoy en día pago 2000 pesos”, explica.

Mayra comenzó a pagar su casa mensualmente con 800 pesos, actualmente paga 2 mil pesos. Al igual que cientos de mexicanos su crédito está estipulado como Veces Salarios Mínimos (VSM), es decir, que el monto del pago se actualiza conforme aumenta el salario mínimo, lo que causa que las mensualidades también suban y se vuelvan deudas casi imposibles de pagar.

Para que Mayra pudiera tener su hogar de Infonavit tuvo que trabajar durante 6 años en una farmacia, durante ese tiempo apenas y pudo conseguir la cantidad mínima para tener una casa pequeña. Debido a que tiene 3 hijos prefirió esperarse a conseguir una más amplia. Con lo que le dio su papá fue suficiente para adquirir el inmueble donde ahora vive.

Luego de un par de años de trabajar en la farmacia decidió renunciar y ahora hace sus pagos en ventanilla, siempre puntuales, asegura, pues si se pasa unos días, de inmediato llega a su puerta personal jurídico del instituto para cobrarle.

“Los atrasos no son porque no se pague, el atraso es porque se me han pasado 50 pesos, porque a Infonavit no te le puedes atrasar por 50 pesos, porque por 50 pesos te está cobrando la mensualidad completa con el jurídico”, dice.

El mismo problema lo tienen sus vecinos, la mayoría son maestros, trabajadores industriales, pequeños comerciantes; gente de otros estados que compraron una vivienda para tener un patrimonio donde invertir y que ahora solo tienen una deuda interminable.

Mayra asegura que no solo son los usuarios del Infonavit con este problema. Hace 10 años, su vecina, una maestra retirada, sacó su crédito en el Fondo de la Vivienda del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Fovissste); al jubilarse creyó que ya debía una mínima cantidad, porque durante todo ese tiempo pagó mensualmente hasta 7 mil pesos, sin embargo y para su sorpresa, la deuda no bajó, sino que también se incrementó.

“Ya no pudo pagar ni liberar su casa. Ahora es jubilada y vive endeudada con el Fovissste porque su deuda no baja. Porque le incrementaron, porque subió el interés de los apoyos del Fovissste y eso pasó”, agrega.

Una ilusión que se convirtió en pesadilla

Pero este problema no es la única adversidad a la que se enfrentan los usuarios del Infonavit en la ciudad de Veracruz, pues muchos de ellos adquirieron sus viviendas en sitios que no estaban municipalizados y, al cabo de algunos años, presentaron diversas deficiencias como falta de servicios de agua potable, luz, alumbrado público y calles que con el paso del tiempo se convirtieron en fugas de aguas negras.

“Entre 2010 y 2012, empezaron los problemas de suministro de agua, los problemas de inseguridad, el tema de que no estamos municipalizados. Las lámparas empezaron a tener problemas. Homex en su momento nos decía que el ayuntamiento tenía que darnos solución y en el ayuntamiento nos decía que no, porque la constructora no había entregado a tiempo a recepción en Obras Públicas el fraccionamiento”, cuenta.

Aunado a la deficiencia en el fraccionamiento Colinas de Santa Fe, se sumó los problemas que surgieron al interior de sus casas, pues muchas fueron construidas con materiales deficientes, lo que a la larga provocó que invirtieran más en la rehabilitación de la estructura.

En el caso de Mayra, a su casa se le levantó el piso, los cimientos son muy frágiles, por lo que en algunas paredes tienen líneas de fractura. A lo largo de los 13 años que lleva viviendo en ese lugar, asegura que ha invertido otros 200 mil pesos en reparar los desperfectos que surgieron. 

“Es una gran desilusión, pues ya a la vez me pongo triste, pero a la vez digo bueno, ya es algo mío. Como dirían por ahí es como una cárcel para nosotros porque es una deuda que no podemos quitarnos de encima”, lamenta.

No puede acceder a programas del Infonavit porque ya no trabaja

Para el expresidente de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI), Pedro Fernández Martínez, es de suma importancia que los trabajadores a la hora de elegir sus hipotecas tomen en cuenta varios factores como, por ejemplo:

Revisar el crédito que se va a obtener y analizar varias opciones para ver cuál es el que se adapta mejor a sus condiciones, así como conocer el lugar donde se va adquirir la vivienda y ocupar el monto para lo que se va a utilizar, ya sea en mejoras de la vivienda o en la compra de una.

“Existen muchas alternativas para reestructurar un adeudo, para cambiar el adeudo. Si usted ya no desea el crédito, acérquese al instituto que le van a ofrecer opciones para restablecer, reestructurar, para finiquitar, para canjear siempre y cuando sea autorizado por la institución”, recomendó.

En mayo del 2022 el Infonavit puso a disposición el programa Ventanilla Universal de Responsabilidad Compartida, donde los usuarios pueden cambiar su crédito de Veces Salario Mínimo (VSM) a pesos y acceder a una tasa de interés fija, esto con la finalidad de acabar con los pagos interminables.

No obstante, para Mayra es imposible acceder a este programa, pues ya no trabaja en una empresa, por lo que seguirá pagando el crédito bajo la modalidad VSM.

ys