BOCA DEL RÍO, VER.- La última vez que Mayra Delgado Ochoa supo algo de su hija Miranda Bautista Delgado, fue el miércoles 7 de agosto. Ese día, la joven salió de trabajar a las 19:00 horas y se dirigiría desde la colonia Venustiano Carranza en Boca del Río hasta su casa en la colonia Predio Malibrán, en el poniente de la ciudad de Veracruz, sin embargo, ya no tuvo contacto con ella.
La familia presume que Miranda Bautista se encontró con su novio Ángel Yahir Tome Palas, quien trabaja como vendedor en una concesionaria de automóviles que se ubica cerca de la tienda de ropa donde trabaja la joven, ya que al igual que en su caso, sus familiares no saben de él desde el mismo día.
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De acuerdo con lo señalado por familiares y allegados a la joven, ambos tenían una relación de confianza y amistad entre ambas familias, por lo que, ante cualquier decisión de una ausencia voluntaria, se habrían comunicado para avisar.
En el caso de Miranda, la Fiscalía General del Estado (FGE) emitió una ficha de búsqueda a través del protocolo Alba, para difundir su fotografía e información que pueda contribuir a ubicarla.
En el caso de Ángel Yahir Tome Palas, la Comisión Estatal de Búsqueda emitió una ficha con sus datos, con la que también se busca difundir su información para contribuir a su localización.
Miranda trabaja para pagar sus estudios en criminología
Miranda Bautista tiene 20 años y trabaja para ayudar a su madre a pagar sus estudios de criminología que cursa en la Universidad Popular Autónoma de Veracruz (UPAV) los fines de semana.
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Mayra Delgado Ochoa, madre de la joven, es empleada doméstica y comparte que su hija ha buscado siempre ayudarla en los gastos del hogar. Entre semana, la joven es trabajadora en una tienda de ropa en la avenida Graciano Sánchez de Boca del Río y los fines de semana acude a clases.
La madre de la joven comparte que su hija se esfuerza por sacar adelante su carrera para dejar los trabajos eventuales y dedicarse de lleno a ejercer su profesión, una vez que concluya su licenciatura.
Miranda también trabaja con una la abogada Herminia Báez, quien -según su madre-, la ha ayudado en su formación profesional incluso antes de ingresar a la licenciatura de criminología en la UPAV.
mb