VERACRUZ, VER.- Caminando entre los turistas que van y vienen en el bulevar costero Manuel Ávila Camacho, una mujer carga con botellas de agua a las que colocó etiquetas con los rostros de personas desaparecidas para regalarlas durante el Carnaval de Veracruz 2023.
Felipa de Jesús Ramírez es una activista que contribuye con madres buscadoras como voluntaria, ella busca a Johanna Jazmín Jaso, desaparecida el 21 de junio del 2022, y a Nelson Mario Quezada Aguirre, un ciudadano de origen ecuatoriano, quien desapareció en la alcaldía Gustavo A. Madero de la Ciudad de México en marzo del 2019.
La búsqueda de Johanna y Nelson la llevó a colocar sus rostros, así como los de 120 personas más que fueron reportadas como desaparecidas por sus familiares, en 2,500 botellas de medio litro de agua que regala a los asistentes al Carnaval de Veracruz 2023.
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“Son rostros de desaparecidos de varios lugares del país, hay de Michoacán, de Veracruz, de Colima, de Guadalajara, de diversos estados; son alrededor de 120 rostros los que se colocaron en más de 2,500 botellas, las vamos regalando mientras vamos caminando con un diablito en donde las vamos cargando”, cuenta.
En su recorrido en la ciudad de Veracruz, Felipa busca los espacios en donde observa que los turistas se concentran, como las playas y la zona de gradas que son ocupadas para apreciar los desfiles de carros alegóricos del Carnaval de Veracruz 2023, que de acuerdo con autoridades, concentrará entre 800,000 y 1,000,000 de personas entre el 1 y 4 de julio en la zona del bulevar costero.
Además de buscar difundir la información de los desaparecidos por si alguien puede aportar información que contribuya a su localización, el ejercicio que realiza contribuye a visibilizar el problema de las personas desaparecidas en el país.
Felipa de Jesús asegura que, durante estos días, encontró una buena aceptación de los turistas que visitan el Carnaval de Veracruz, ya que las imágenes de las botellas de agua con etiquetas de personas desaparecidas son compartidas en redes sociales por quienes las reciben, agradeciendo el gesto y difundiendo la información.
“La gente ve las fotos, siempre nos dan la bendición, algunos nos piden las fotos para compartirlas en redes sociales, afortunadamente estamos encontrando una buena respuesta entre la gente con la que nos acercamos.
“A nosotros nos deja un gran gusto de poder ayudar a madres y padres buscadores, ellos siempre nos dejan una gran lección de que no tenemos que esperar a que nos pase para ayudarlos”, comparte.
Veracruz encabeza casos de desapariciones
El estado de Veracruz es el cuarto en el país con más personas reportadas como desaparecidas, de acuerdo con información de la Comisión Nacional de Búsqueda (CNB). La dependencia reconoce como cifra oficial a 7,402 personas desaparecidas hasta el 2 de julio del 2023.
A Veracruz, lo supera en casos de personas desaparecidas los estados de Jalisco (14,957), Tamaulipas (12.981) y Estado de México (11,834). Mientras que por debajo de la entidad veracruzana se encuentran Nuevo León (6,638), Sinaloa (5,572) y Michoacán (5297).
Para colectivos de familiares de desaparecidos, las cifras oficiales sobre los reportes de personas desaparecidas que se queda corta para la realidad, ya que afirman que el subregistro es mayor, debido a que en muchos casos no existe denuncia por temor de los familiares.
Las desapariciones de personas van de la mano con otro problema que exhibe la magnitud de los casos y es el número de fosas clandestinas distribuidas en diversos puntos del país.
De acuerdo con el Cuarto Informe de la Subsecretaría de Derechos Humanos, Población y Migración de la Segob, en Veracruz se registraron 647 fosas clandestinas entre 2006 y el 24 de noviembre de 2022, el último corte hecho por la dependencia ese año.
Veracruz se colocaba a la cabeza y superaba en número de fosas clandestinas a Tamaulipas (547), Guerrero (489), Sinaloa (447) y Chihuahua (346).
La búsqueda de personas desaparecidas es encabezada principalmente por sus familiares, quienes se integran a colectivos desde los que gestionan la exploración de predios donde existen indicios de la presencia de fosas clandestinas; además, de difundir la información de sus desaparecidos como es el caso de Felipa de Jesús Ramírez, quien reparte en el Carnaval de Veracruz botellas de agua con los rostos de las personas que son buscadas.
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