HISTORIAS LSR

Zaid y Jaziel vencieron al cáncer y fueron bomberos honorarios en Coatzacoalcos

Los menores de 3 y 10 años, fueron sometidos a muchas quimioterapias, pero este miércoles tocaron la campana de celebración

Los dos niños tuvieron la oportunidad de ser bomberos por un día
Vencieron el cáncer.Los dos niños tuvieron la oportunidad de ser bomberos por un díaCréditos: Fluvio Martínez
Escrito en VERACRUZ el

COATZACOALCOS, VER. – A Zaid de tres años y Jaziel de diez, originarios de Coatzacoalcos, Veracruz, una enfermedad los reunió durante meses: el cáncer. A pesar de no ser detectados durante las mismas fechas, este miércoles 3 de julio, tocaron juntos la campana de la victoria, ya que ambos menores vencieron a este mal que durante meses les causó dolor, preocupación y mucho sufrimiento a su corta edad.

Hoy sus historias se unieron en la estación central de Bomberos de esta ciudad, donde fueron nombrados elementos honorarios, en medio de un ambiente de alegría y mucho agradecimiento.

Zaid perdió un ojo a causa del cáncer

A Zaid le detectaron el cáncer de retinoblastoma cuando apenas tenía dos años, su madre la señora Cruz de los Ángeles, contó a este medio, que recibieron la noticias el día en que el menor cumplió los dos años.

No era solo un tumor, sino varios malignos, que comenzaron a invadir su rostro y llegaron a su ojo derecho, lo que ponía en riesgo su vida, por lo que se vieron en la necesidad de decidir entre perder el cincuenta por ciento de su vista o la vida

“Nos dicen los doctores, que eran varios tumores, solo que el del ojito derecho estaba muy grande, y corría el riesgo de muerte; nos dijeron que si llegaba al nervio óptico él podía morir; es muy difícil ver a tu hijo que lo están picando, que llora y ver que no quiere es muy difícil”, relata aun con lágrimas. 

En once meses fue sometido a 16 quimioterapias, en el Hospital General del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de esta ciudad, donde asegura que hubo momentos de recaída, donde perdieron la esperanza. Pero la fe, y las ganas de vivir de Zaid, vencieron al mal.

“Yo me quedo con lo malo y lo bueno de todo lo que vivimos, pero agradezco a Dios porque está con vida y venció al cáncer”, expresa.

El menor aun muestra las consecuencias de la quimioterapia en su cabeza y piel, pero no se da por vencido.

Jaziel duró 3 años para vencer la leucemia linfoblástica aguda

De cuerpo delgado, pero siempre con una sonrisa muy animada, Jaziel asegura que vivió momentos muy difíciles durante su tratamiento, sobre todo cuando le inyectaban los medicamentos.

Al menor que cursa el cuarto grado de primaria, le detectaron leucemia linfoblástica aguda, desde que tenía siete años; a partir de ese momento inicio el martirio lleno de quimioterapias.

“Como una vez me dolió, cuando me inyectaban, pero ya estoy bien; no sé qué quiero ser de grande, estoy pensando todavía, pero pues estamos felices”, expresa el menor alegre.

Su madre agradece a Dios y a toda la familia que siempre les apoyó, reconociendo que había días donde parecía que no ganarían la batalla.

“Es que fueron 120 semanas, donde Jaziel tuvo sus recaídas, bajas y altas, pero de la mano de todos, de la familia y de Dios salimos; hemos aprendido mucho de este mal y gracias a Dios estamos logrando vencerlo”, expreso la madre.

Fueron bomberos por un día

Ambos menores fueron atendidos en el Hospital del IMSS de Coatzacoalcos, donde esta semana los doctores les confirmaron que vencieron al cáncer, algo que llenó de alegría sus corazones y el de sus padres.

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En la estación central de Bomberos decidieron celebrar con ellos nombrándolos elementos honorarios. Recibieron su casco de protección, usaron las mangueras para apagar el fuego y viajaron en las unidades de emergencia hacia el hospital.

“Lo hacemos de corazón, y en este caso recibimos a Jaziel y Zaid, después de este evento donde fueron nombrados bomberos, vamos al hospital del IMSS donde vamos a seguir el protocolo de tocar la campana en señal de que vencieron al cáncer”, puntualizó David Esponda Cruz, director de Protección Civil municipal.

Sus padres agradecen a Dios por permitirles vencer al cáncer y, en compañía de amigos y muchas porras, celebraron este logro que les permitirá continuar con sus sueños.

Las sonrisas hablan del momento especial que ambos menores vivieron, donde también llegaron sus compañeros de clases.

MB