TLAQUILPA, VER.- Un policía municipal falleció durante el pasado miércoles 30 de agosto en un hospital de Orizaba, luego de varios días de agonía a causa de las lesiones provocadas por un linchamiento sufrido a manos de pobladores del municipio de Tlaquilpan, ubicado en la zona serrana del centro de Veracruz.
Fue el pasado 26 de agosto cuando personal de la Policía Municipal detuvo a un hombre en estado de ebriedad que se encontraba causando disturbios en la vía pública, tras lo cual fue llevado a la comandancia de la Policía Municipal. Sin embargo, horas más tarde llegó un grupo de jóvenes, adultos y mujeres, quienes con machetes, palos y cadenas en mano, se dirigieron a la comandancia de la Policía para exigir la liberación del detenido de manera inmediata.
Aunque los policías que estaban dentro de la comandancia trataron de impedir que el detenido fuese liberado por las personas, fueron superados en número, por lo que buscaron resguardarse ante cualquier situación que se pudiera generar.
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Los habitantes comenzaron a destrozar unidades oficiales como patrullas y lograron sacar a dos elementos, a quienes lincharon y golpearon brutalmente, dejándolos seriamente heridos. Tras el linchamiento, los pobladores se retiraron.
Unidades de emergencia arribaron al municipio y trasladaron a los dos policías municipales a un hospital privado de Orizaba de manera urgente. Tras casi 4 días, uno de los oficiales falleció a causa de las lesiones provocadas por los pobladores.
De acuerdo con reportes de la zona, el alcalde de Tlaquilpan, Otilio Salas Cervantes, ha tratado de evitar que salga a la luz pública el tema, pues aun cuando un policía municipal murió y los daños a las unidades e instalaciones oficiales fueron importantes, no hacen nada pues estarían presuntamente solapando dichas acciones. En tanto la Síndica Única Victoria Gálvez Sánchez, no ha levantado la denuncia correspondiente.
El alcalde Otilio Salas Cervantes ha sido señalado de tener en el completo abandono a la Policía Municipal, pues quienes la integran no cuentan con el más mínimo equipamiento para realizar su labor diaria y mucho menos para contener una manifestación o multitud de personas.
La denuncia correspondiente no ha sido interpuesta por la Síndica Municipal, donde dejaron daños materiales importantes y la muerte de un oficial municipal.
mb