GUTIÉRREZ ZAMORA, VER.- Hace 24 años, el frente frío número 5, una baja presión y la depresión tropical número 11, convergieron y desencadenaron uno de los peores desastres naturales en el norte de Veracruz y sierra de Puebla, siendo Gutiérrez Zamora el municipio más afectado por el crecimiento del río Tecolutla.
En 72 horas las inundaciones y el deslizamiento de cerros mataron a 384 personas y dejaron a 450 mil damnificadas; cientos de personas quedaron en calidad de desaparecidas. Esta catástrofe, que aún supera al huracán Grace de 2021, sigue estando presente en el recuerdo de los damnificados sobrevivientes.
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Además de este municipio, el agua arrasó con Papantla, Poza Rica, Tecolutla, Cazones, Nautla, Martínez de la Torre, Álamo y toda la sierra del Totonacapan. El choque del frente frío y la depresión tropical desencadenaron lluvias intensas que arrasaron con todo a su paso, dejando una estela de muerte y desolación.
Las precipitaciones iniciaron desde el 3 de octubre de 1999, al día siguiente se intensificó y no se detuvo. Para los primeros minutos del día 5 el río Tecolutla ya se había desbordado y la tragedia inició, pues ya había precipitaciones mayores a los 200 milímetros. Al amanecer la claridad reveló el margen de la destrucción.
Las lluvias fueron todavía más intensas y ya había personas atrapadas en las comunidades más bajas y asentadas a las orillas del río, algunas por debajo de su nivel. La ayuda no podía llegar por ningún medio, por aire el temporal lo impedía, por tierra era imposible, en tanto que tampoco se podía navegar ante la fuerza de la corriente.
Tuvieron que pasar días y semanas para que la ayuda llegara a los municipios y localidades afectadas por las inundaciones.
Para el 7 de octubre arribaron a la zona norte de Veracruz el presidente Ernesto Zedillo junto con el gobernador Miguel Alemán Velasco, quienes recorrieron una parte del desastre, que inicialmente reportó 76 muertos y 59 desaparecidos, pero con el paso de las semanas la cifra fue aumentando hasta llegar al número total de víctimas de 384.
Los apoyos llegaron lentamente, ya que no había carreteras suficientes para evacuar a personas atrapadas. Se reportó la destrucción total de 22 caminos y carreteras y la caída de 11 puentes. Tuvieron que usarse aviones y helicópteros del gobierno, de la Marina y del Ejército para llevar alimentos, medicinas y para transportar a damnificados fuera de las áreas.
mb