"Espero dejar a los neozelandeses con la creencia de que pueden ser amables, pero fuertes, empáticos pero decisivos, optimistas pero concentrados. Y que puedes ser tu propio tipo de líder, uno que sabe cuándo es el momento de irse": Jacinta Ardern
Hace unos días, el 19 de enero de 2023, la primera ministra de Nueva Zelanda Jacinta Ardern presentó su renuncia al cargo del que se separará el 7 de febrero, después de seis años en el cargo. Fue la jefa de gobierno más joven del mundo cuando fue elegida primera ministra en 2017, a los 37 años. Un año después se convirtió en la segunda líder mundial elegida en dar a luz mientras estaba en el cargo, después de Benazir Bhutto de Pakistán en 1990, entre las razones para su dimisión habló del agotamiento. Durante las vacaciones de verano tomó el tiempo para considerar su futuro, y en un ejercicio de humildad y al no encontrar suficiente energía para continuar como mandataria, pues el país necesita a toda la atención, dejará el puesto a partir del 7 de febrero del 2023, ese día llamará a elecciones que estarán programadas para inicios de octubre de este año.
Por supuesto que desde el inicio de su mandato la violencia política comenzó a menos de 24 horas que Jacinta Ardern asumiera el liderazgo del Partido Laborista de Nueva Zelanda, al mismo tiempo que le preguntaban si sentía que una mujer podía tener una carrera de alto nivel y un bebé al mismo tiempo. Hoy a cinco años, es casi un chiste pues la primera ministra dio a luz en el cargo, demostrando que las mujeres pueden hacer ambas cosas (aunque, como ella misma se ha apresurado a señalar, no sin una pareja de apoyo).
La Primera Ministra ha reconocido los últimos cinco años y medio como los "más satisfactorios" de su vida, pero liderar el país durante la "crisis" ha sido difícil. En 2019, a raíz de los ataques de la mezquita de Christchurch, que dejaron 51 muertos, era inequívoco que el pistolero era un terrorista; pero hizo hincapié en que no representaba al pueblo de Nueva Zelanda. Se negó a nombrar al pistolero para no darle notoriedad ni foro, fue la determinación y empatía de la primera ministra que mantendría unido al país durante esa crisis.
Luego vino la pandemia de covid-19, la erupción volcánica de la Isla Blanca, sumado a la crisis del costo de la vida, temores nacionales sobre la delincuencia y la recesión por motivo de la pandemia. A principios de marzo de 2020 ordenó aislamiento obligatorio para cualquier persona que llegará al país, para finales de mes, las fronteras estaban cerradas y se había puesto en marcha un confinamiento nacional. La política de "duro y temprano" parece haber funcionado. La economía sufrió un golpe masivo. En 2022, en una entrevista con la BBC, la ministra Ardern consideraba que el precio pagado por mantener a las personas a salvo de la covid-19 había resultado en la disminución de popularidad de su gobierno.
En su discurso de renuncia defendió su forma diferente de estar y hacer política, más humana, empática y cercana a la ciudadanía, enumeró los logros de su gobierno, de los que está particularmente orgullosa, como los avances en el cambio climático, la vivienda social y la reducción de la pobreza infantil, entre otros.
Jacinta Ardern es una política que ha inspirado a generaciones de mujeres en todo el mundo. Al mismo tiempo, también ha sido un recordatorio de que tenemos todavía un largo camino por recorrer para garantizar que las mujeres en puestos de decisión y liderazgo puedan ejercerlos en un ambiente libre de violencia y con las mismas garantías que los varones.