El accidente del vuelo AI171 de Air India, ocurrido el jueves en Ahmedabad, India, ha reavivado las preocupaciones en torno al Boeing 787-8 Dreamliner, uno de los aviones comerciales más utilizados en vuelos de largo alcance, según The New York Times.
El trágico suceso representa el primer accidente mortal que involucra a un Boeing 787-8 Dreamliner, desde su lanzamiento en 2011, y ocurre en un momento clave para la industria aeronáutica, que enfrenta crecientes presiones por parte de reguladores, consumidores y aseguradoras, destaca el diario neoyorkino.
Además, vuelve a poner en el centro del debate la cadena de suministro global que da forma a estos aviones y el papel de las aerolíneas que los operan.
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En su página web, Aeroméxico informa que en su flota aérea cuenta con naves 787-9 Dreamliner, con capacidad para 274 pasajeros, reduce los efectos del jetlag, disminuye el ruido y posee un avanzado sistema de control de temperatura.
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La aerolínea también cuenta con 787-8 Dreamliner, el cual vuela con 60% menos ruido en la cabina, tiene mayor eficiencia en el gasto de combustible y una reducción de 25% en las emisiones de dióxido de carbono.
Contexto: el jueves, una tragedia aérea en la India sacudió al sector aeronáutico internacional, luego de que un avión de Air India con destino al Reino Unido se estrellara segundos después del despegue, dejando un saldo preliminar de más de 260 fallecidos. El incidente, que involucró un Boeing 787-8 Dreamliner, representa el peor desastre aéreo en el país asiático desde 1996.
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Un avión de fabricación global
The New York Times expone que el Boeing 787, conocido como Dreamliner, es uno de los aviones más sofisticados de fuselaje ancho en el mundo. Su fabricación es resultado de una compleja red de proveedores internacionales:
- GE Aerospace suministra los motores GEnx-1B, los mismos que equipaban el avión siniestrado de Air India.
- RTX Corporation (anteriormente Raytheon Technologies) proporciona componentes eléctricos e hidráulicos.
- Safran, con sede en Francia, participa con el tren de aterrizaje y otros sistemas críticos.
Estos tres gigantes de la industria forman parte de la cadena global que permite la producción de un avión que, hasta antes del accidente, tenía uno de los historiales de seguridad más sólidos en su categoría desde su entrada en servicio en 2011.
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¿Quiénes operan el Boeing 787?
Actualmente hay más de 1,200 unidades del Boeing 787 operando en todo el mundo, en sus tres variantes (787-8, 787-9 y 787-10). Entre los principales operadores se encuentran:
- Air India (27 aeronaves)
- All Nippon Airways, Qatar Airways, British Airways
- American Airlines, United Airlines y LATAM Airlines
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Este modelo se utiliza principalmente para vuelos de largo alcance debido a su eficiencia en consumo de combustible y su capacidad para cubrir rutas transcontinentales sin escalas.
En el caso de nuestro país, Aeroméxico es la única aerolínea nacional que opera el Boeing 787; cuenta con 8 unidades del 787-8 Dreamliner y un total de 14 del 787-9 Dreamliner en su flota activa. Esas aeronaves se utilizan para conectar a México con ciudades como Londres, París, Madrid, Tokio y Seúl.
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Todos los Dreamliner de Aeroméxico están equipados con los mismos motores GEnx-1B que el avión accidentado en India.
La aerolínea incorporó su primer 787 en 2013 y desde entonces lo ha consolidado como el modelo insignia para sus rutas internacionales.