Gómez (Homero) es un personaje creado en 1939 por Charles Addams quien buscaba representarlo como un hombre excéntrico, divertido, un padre diferente pero responsable y por supuesto, con un amor profundo hacia su esposa Morticia Addams. Un hombre exitoso en el área de la abogacía que, irónicamente, no tenía interés en La Bolsa de Valores ni en terceros sino más bien Gómez tenía interés en bailar tango, practicar esgrima, hacer acrobacias, chocar trenes de juguete y estar con su familia. 

En la memoria colectiva, quedó aquel personaje interpretado por Raul Julia en la década de los noventas; un hombre alto y delgado que disfrutaba de colmar de besos a Anjelica Huston (Morticia Addams).

“La señorita Addams, tuvo un viaje educativo interesante; ocho escuelas en cinco años…”, con esta frase arrancó el trailer que nos presentaría una versión nueva de la familia Addams bajo la dirección del aclamado Tim Burton. 

El 23 de noviembre, la serie "Wednesday" se estrenaría en la plataforma de Netflix ,y generaría una ola de comentarios positivos sobre el papel de Jenna Ortega (Merlina) y a la par, también reluciría la xenofobia, la discriminación y la gordofobia, especialmente, sobre Luis Guzmán (Gómez) quien ha sido comparado con Raul Julia en múltiples ocasiones. 

“¿Y ese Homero mexicano?”, “Nada que ver, Homero era un guapo seductor”, “Zaz, ¿y ese Homero qué?, definitivamente Morticia se casó sólo por dinero”,  "la inclusión forzada nos jodió", se lee en algunos comentarios en la cuenta oficial de Netflix

Sin embargo, muchos otros fanáticos de la obra de los Addams ha señalado que el casting de Luis Guzmán fue acertado, pues tiene un gran parecido a la caricatura original y mencionaron el excelente trabajo como actor que ha desempeñado desde 1977, por lo que no es necesario comparar ni desdeñar a ningún actor y mucho menos, si se trata de apuntarlo por su físico.

“El casting de Luis Guzmán es lo más cercano que he visto a la caricatura original de la familia Addams”, “Luis Guzmán es un excelente actor y su personaje es increíble, lo único que les molesta de su papel en Merlina es que no lo consideran convencionalmente atractivo”, respondieron algunos usuarios.  

Los medios masivos y su íntima relación con la belleza hegemónica 

La belleza hegemónica (que responde a la gordofobia), reproduce en los medios la idea de que lo deseable y lo valioso de los cuerpos responde a un único modelo; todo cuerpo que se nos presente, por ejemplo en la televisión, será juzgado y ridiculizado. Así, todo aquello que no entre en nuestra idea de belleza y delgadez, se vuelve indeseable y castigable en términos sociales, señala el documento “Los discursos estigmatizantes sobre los cuerpos” expedido por el Gobierno de Argentina. 

"Estos conceptos están cargados de un carácter interseccional y esta problemática se agrava cuando es atravesada por estereotipos de género, raciales, xenófobos o clasistas."

Sobre esta línea, el artículo "Representaciones mediáticas: Tres notas sobre los procesos semióticos en los medios masivos”, retoma que los medios masivos que consumimos diariamente, deben ser entendidos como un actor fundamental en la construcción de significados e imaginarios y que, precisamente, contribuyen a la homogeneización de cuerpos y comportamientos en nuestra sociedad, replicando la xenofobia, gordofobia y racismo, por lo que mostrar la diversidad en los medios es sumamente necesario para detener estos discursos. Así que no, la inclusión "no nos jode" y la "inclusión forzada" tampoco existe; existe el reconocimiento y visibilización de aquellos sectores que históricamente han sido rezagados, rechazados, ridiculizados y excluidos. 

Acá algunos puntos sobre la estigmatización que son necesarios considerar de acuerdo al documento “Los discursos estigmatizantes sobre los cuerpos” expedido por Observatorio de la Discriminación y el Área de Investigación del INADI.

  • No reducir a las personas a su aspecto físico, ni a su cuerpo como un todo
  • Deshacerse de la idea de que es necesario ajustarse, forzosamente, a un tipo de cuerpo
  • Erradicar toda referencia a determinados atributos físicos y estéticos como una meta para todos
  • No reproducir estereotipos que unívocamente asocien a la gordura con aspectos negativos
  • Evitar a toda costa la radicalización con base a sus características 
  • Reflexionar sobre el carácter racista del modelo estético hegemónico