No es un secreto que, en Qatar, país sede del Mundial, se han hecho distintas denuncias sobre violaciones a derechos humanos y sexuales, además de explotación laboral para la construcción de los estadios donde se disputarán los partidos. Así mismo, es bien sabido que las personas pertenecientes a la comunidad LGBTIQ+ son castigadas dentro del territorio, por lo que organismos internacionales han manifestado su preocupación a que se respete la integridad de las personas de la diversidad sexual.

A pesar de que se ha asegurado que todas las personas, sin importar sus preferencias, son bien recibidos en Qatar, muchos activistas afirman que esto no asegura que se respetarán sus derechos. Los activistas afirman que esta supuesta inclusión no es legítima debido a las condiciones en las que se encuentran las personas pertenecientes al país, por lo que han decidido ‘boicotear’ el evento mientras que, muchos aficionados pertenecientes a la comunidad LGBTIQ+ han optado por no viajar a Qatar para evitar posibles violaciones a sus derechos humanos.

Cada dos días nos dicen que somos bienvenidos y, al día siguiente, cambian. Los mensajes no fueron buenos. Al final, mucha gente decidió no ir. Nosotros, por ejemplo, estamos boicoteando totalmente el evento, afirmó Bertrand Lambert, vicepresidente de PanamBoyz&Girlz United.

Mientras que Di Cunningham, cofundadora de la organización Three Lions Pride, dijo que “oímos repetir, con una especie de insistencia robótica, que estaremos a salvo, que somos bienvenidos, pero esto no está respaldado por ningún elemento concreto o proyecto documentado”.

Las problemáticas de Qatar

En Qatar, las leyes parecen estar hechas de contradicciones ya que las mujeres cuentan con un alto nivel educativo y el 51% de ellas está trabajando. Se les permite participar activamente en los negocios, pero se enfrentan a diferentes presiones para mantener los roles de género tradicionales. También participan en política, aunque su presencia en los altos cargos públicos es limitada.

Así mismo, las personas pertenecientes a la comunidad LGBTIQ+ son discriminadas y, de acuerdo con Amnistía Internacional, la construcción de los recintos deportivos para el próximo mundial estuvo llena de explotación laboral y faltas graves a los derechos humanos.

Debido a esto, cantantes como Dua Lipa y Shakira han rechazado presentar su show como parte de la apertura del Mundial, esto como un posicionamiento en contra de la violación de derechos humanos tanto como para las mujeres como para las personas pertenecientes a la comunidad LGBTIQ+.

APVB