PACHUCA.- En unas cuantas horas, La Villita en la ciudad de Pachuca recibirá a cientos de peregrinos para las celebraciones guadalupanas, pero antes, hace aproximadamente 428 años, la Virgen era venerada en Abasolo donde actualmente la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH) tiene unas instalaciones.
Con el paso de los años, ese centro religioso localizado en una de las más importantes avenidas de la llamada Bella Airosa se ha convertido en un referente para demostrar la fe guadalupana, en especial cada 12 de diciembre y este jueves próximo no será la excepción, pues albergará decenas de personas.
Por lo que, a propósito, desde LSR Hidalgo te dejamos la historia de ese lugar, pues tiene algunas curiosidades que pocos que la conocen y que te dejarán sorprendido si es que acudes en estas fechas a demostrar la fe en la Virgen junto a otras personas, algunas de las cuales llevarán ofrendas.
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El llamado día grande de La Villita será mañana jueves 12 de diciembre y comenzará con unas tradicionales mañanitas, para luego ofrecer un programa lleno de misas y servicios religiosos en los que habrá bendiciones por parte de los padres y al salir se podrá caminar entre los puestos ya instalados.
Hace 428 años la Virgen era venerada en Abasolo
De acuerdo con registros históricos, las primeras veces que se comenzó a venerar a la Virgen de Guadalupe datan desde hace 428 años, pues en 1596 se estableció una pequeña capilla donde los antiguos pobladores acudían a dejar ofrendas y mostrar su devoción, así como algunas ofrendas como agradecimiento.
Años después, para 1725, se autorizó edificar el hospital San Juan de Dios, aunque en el terreno donado se encontraba la capilla mencionada líneas arriba, espacio que fue demolido y fue construido un enorme salón que con los años pasó a llamarse Ingeniero Baltasar Muñoz Lumbier perteneciente a la UAEH.
Sin embargo, el centro de culto se retomó en la casona con un espacio más amplio, aunque todavía con carácter de capilla, que siguió funcionando hasta 1837 cuando murió el padre Fray Agustín de Melgarejo último prior de la orden en Pachuca, quien ya arrastraba la prohibición de otorgar servicios hospitalarios.
Santuario se movió a la avenida Benito Juárez y La Villita se hizo con mucho esfuerzo
Pese a la pérdida de la capilla en lo que ahora es el centro cultural La Garza de la UAEH en la calle Abasolo, el culto guadalupano en Pachuca continuó y a mediados del siglo XIX se decidió construir una pequeña ermita en el que era el camino México-Pachuca, ahora conocida como avenida Benito Juárez.
El espacio era muy pequeño, pero seguía recibiendo a decenas de personas que veneraban a la Virgen de Guadalupe, lo que motivó a Virginia de Hernández, esposa de Francisco Hernández, secretario general de gobierno de Pedro Ladislao Rodríguez, se realizan los trabajos de ampliación en el año de 1907.
En esa época, la superficie de esa iglesia hecha de piedra tenía apenas unos 8 metros de alto y unos 5 de ancho, bastante humilde, y se mantuvo así hasta que en 1923 se decretó la fundación de la capilla ahora como parroquia, lo que incluyó una expansión en los mismos terrenos que antes eran casi losa límites del pueblo.
Aunque los trabajos enfrentaron carencias del clero, pues en principio el techo fue de tejabán; debieron pasar 10 años, 1933, hasta que con más fondos se dio otra ampliación de la capilla de piedra que llegó hacia la calle Cuauhtémoc; en febrero de 1952 el arzobispo de la región Arsega hizo la construcción de La Villita actual.
Así es La Villita, ¿sabías que tiene unas catacumbas que es un cementerio?
Tras sus reiteradas expansiones, enmarcadas por breves periodos de abandono, La Villita logró hacerse de un terreno de 1,488 metros cuadrados, lo que le valió para ser nombrada en septiembre de 2004 como basílica menor con el nombre Santa María de Guadalupe y así recibir a decenas de peregrinos cada año.
La fachada y sus dos campanarios que tienen el mismo tamaño están hechos con cantera blanca; mientras que adentro hay esculturas de santos católicos y pinturas artísticas, algunas hechas por los maestros Jesús Becerril y Jacobo Alcántara; su capilla, coloquialmente conocida como Catacumbas, es ahora zona de sepulturas.
Habrá cierre de calles, estaciones del Tuzobús y operativo policial
Para los festejos del jueves 12 de diciembre, la llamada Bella Airosa sufrirá el cierre de calles y estaciones del Tuzobús, pues en plena avenida Juárez frente al centro religioso se instalará una verbena popular con puestos ambulantes que ofrecerán desde comida hasta artículos de la fe e incluso ropa y juguetes.
En ese sentido, autoridades del ayuntamiento informaron que desplegará un operativo con ayuda de elementos de su Policía municipal para vigilar la festividad guadalupana, además de vigilar el tráfico, pues una parte de la avenida Benito Juárez estará cerrada y habrá desvíos para quienes vayan del centro al sur.
cem