JUSTICIA

María lleva cuatro años en busca de justicia por el feminicidio de su hija de 22 años

Además de atravesar por las dolosas audiencias en las que tiene que ver al asesino de su hija, enfrenta un juicio por la custodia de su nieto con los abuelos paternos, así han transcurrido cuatro largos años para María

Lleva cuatro años esperando que sentencien al asesino de su hija.Créditos: LSR Hidalgo
Escrito en HIDALGO el

Pachuca.- El día que murió su hija ella la visitó porque se acababa de cambiar de casa, estuvo con ella, platicaron, pero por la tarde se retiró. En la madrugada recibió una llamada en la que le dijeron que su hija estaba en el hospital y que su nieto había sido resguardado en la agencia del Ministerio Público, también le dijeron que era muy importante que acudiera porque presentaba un estado de salud grave

Es María - nombre ficticio para no entorpecer el proceso penal - es madre de Jimena (también nombre ficticio) quien murió tras haber recibido tres puñaladas en la cabeza por parte de quien fuera su pareja sentimental y el padre de su hijo.

Al llegar al hospital la encontró sedada, llena de sangre y preparada para entrar al quirófano, sin saber qué es lo que había ocurrido. Firmó los papeles para autorizar los procedimientos y tratar de salvarle la vida a su hija

Después de dos horas de que inició la cirugía, salió el médico y le informó que le habían hecho una cirugía en la cabeza porque tenía un derrame cerebral y tres puñaladas, una de ellas le había perforado el cráneo y le dijo que se preparara para lo peor porque su hija ya no podría despertar. 

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Jimena no fue la única que aquel 2 de mayo de 2020 recibió puñaladas, también su hermano fue apuñalado en el pecho y por el mismo agresor: la pareja de Jimena.

Imagen ilustrativa | Crédito: Archivo LSR 

Tras la llamada en la madrugada, María estaba a punto de enfrentar la noche más larga de su vida, fue noticia tras noticia, primero saber que su hija se debatía entre la vida y la muerte, luego le informaron que su hijo también estaba en el hospital por una puñalada recibida, pero una vez que pasó el peligro fue aprehendido, pues se le responsabilizaba del daño causado a Jimena - su hermana -.

Imagen ilustrativa | Crédito: Archivo LSR 

Pero aún faltaba lo peor, María no sabía qué había ocurrido y por qué sus hijos estaban en esa condición, hasta que alguien se le acercó y le informó que en la casa de su hija había ocurrido un delito, hasta ese momento intento de feminicidio, el cual se consumaría unas horas más tarde cuando Jimena murió.

El juicio se alarga

Hoy, María acude a los juzgados de Oralidad - luego de cuatro años que ocurrió la tragedia de perder a su hija y que su nieto quedara huérfano, la han llamado para la audiencia de Juicio y aunque ella dice que es desgastante porque tiene que recordar los hechos cada vez que acude, guarda la esperanza de hacer justicia por el asesinato de su hija.

Imagen ilustrativa | Crédito: Archivo LSR 

Lo más complicado del proceso - además de que se ha extendido por muchos años - es ver al homicida de su hija “verlo a él que está como si no hubiera hecho nada y a sus papás diciendo que su hijo es inocente, cuando saben perfectamente que le hizo daño a mi hija y que dejó a mi nieto sin su mamá”.

María no sólo enfrenta el proceso penal que se inició por la muerte de Jimena, también está en litigio por la Guarda y Custodia de su nieto, a quien los abuelos paternos le quieren quitar, pero el proceso está suspendido en tanto le dictan una sentencia al agresor de su hija.

Esta vez la audiencia de debate e inicio de juicio fueron reprogramados; la razón: el acusado cambió de abogados y los nuevos no contaban con una copia de la carpeta de investigación, por lo que se les dio un plazo para empaparse del tema y hacer una defensa técnica adecuada. La audiencia se difirió para el 21 de junio.

Imagen ilustrativa | Crédito: Archivo LSR 

Ha sido un proceso jurídico largo por la tramitación de amparos por parte del acusado, han pasado cuatro largos años desde aquella noche trágica, ese mismo año se registraron 20 feminicidios en Hidalgo y mayo - el mes en el que murió Jimena - fue el de mayor incidencia con cuatro registros de asesinatos de mujeres con características de feminicidio.

Era alegre y tenía ganas de vivir

Cuando la mataron, Jimena tenía 22 años, un hijo de cuatro años y muchas ganas de vivir y aportar al mundo. Llevaba cinco años viviendo con el responsable de su muerte, incluso se había alejado de su familia porque casi no le permitía visitarlos.

“Casi no la veía porque su pareja no la dejaba que viera su familia, siempre que la veíamos era en presencia de su suegra, de su cuñado e incluso del agresor, porque no la dejaba tener reuniones a solas con su propia familia”, recuerda María. 

Jimena ayudaba en la administración de una fábrica de muebles que posee la familia del agresor, pero decidió salirse de ahí porque su suegro la empezó a acosar, quería que fuera su mujer diciéndole que nadie se iba a enterar y que nunca le iba a faltar nada. Ella lo comentó con su pareja y ambos salieron de la fábrica, pero meses más tarde él regresó.

María considera que debería existir un programa de apoyo para las personas que son víctimas indirectas de feminicidio, pues quisiera ser escuchada “como mamás que perdemos a nuestros hijos a manos de unas personas que no tienen corazón y más con esta persona que mi hija confío en él, que lo quiso y lo apoyó; él no sabe el daño que nos hizo, pero soy consciente que algún día mi nieto va a crecer y él lo va a poder juzgar”. 

Imagen ilustrativa | Crédito: Archivo LSR 

La mujer que ahora se encarga de su nieto, recuerda que su hija era una persona alegre, feliz, que no se metía con nadie, obediente y muy bonita, su muerte no debe quedar impune y su agresor debe recibir la pena máxima que es de 50 años.