Pachuca. –Desde hace 11 días Gabriela Zamora Díaz desconoce el paradero de su hija de 4 años de edad, la pequeña Lía fue sustraída mientras dormía. Se la llevó su papá Rodrigo N en complicidad con Graciela N, la abuela paterna de la niña. Las dos personas ya fueron denunciadas por privación ilegal de la libertad.
Por este caso, la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH) activó una ficha de búsqueda con número de reporte FBDHGO/205/2023, donde se establece que el padre de Lía no tiene la custodia.
La mamá de la niña logró la guarda provisional el pasado 23 de junio dentro de un juicio familiar que se lleva en juzgados de Pachuca y una semana después de dicha resolución, ocurrió la sustracción.
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Aquel 3 de julio, Gabriela llevó a Lía a la casa de su tía porque ahí se la cuidan mientras ella trabaja. El día transcurrió con normalidad hasta que a las 4 de la tarde le llamaron para contarle sobre la sustracción de la niña.
Gabriela se salió del trabajo, se trasladó a casa y allí su tía le informó que Graciela, la abuela paterna de la niña, tocó la puerta y pidió ver a Lía, cinco minutos después se presentó Rodrigo porque era habitual que dos veces por semana visitara a su hija.
Como Lía estaba durmiendo la cargaron, dijeron que iban por una cobija al auto, pero se la llevaron a bordo de un carro Versa de color gris.
“Mi mamá recibió una llamada de él (Rodrigo), le dijo que necesitaba hablar con ella. Le dijo: ya fui por la niña, necesito que me dé su ropa”.
Gabriela comentó que después del suceso no logró entablar conversación con su expareja, a quien antes de la sustracción, denunció el 20 de junio por violencia familiar ante el Centro de Justicia para Mujeres del Estado de Hidalgo.
“Llamé al 911 y las patrullas llegaron, pero la niña ya no estaba. Me fui a buscarla a toda la carretera México-Pachuca, pero no encontré el carro donde se la llevaron, que fue en el de su hermano. Hasta el momento no sé nada de ella”.
La madre denunció a Rodrigo y Graciela por privación ilegal de la libertad en contra de Lía. Tras iniciar la carpeta Gabriela dijo que las autoridades procuradoras de justicia contactaron al padre de la menor para citarlo y que presentara a la niña, pero se negó con el argumento de que no tenía ningún citatorio formal. Entonces, Gabriela fue a realizar la notificación a una vivienda de la alcaldía de Iztapalapa, Ciudad de México, donde viven los abuelos paternos de Lía.
“Yo fui a dejar el citatorio para él y su mamá, pero nunca me abrieron, estuve más de una hora, así es que dejé pegados los citatorios que me dijo la MP (Ministerio Público). Incluso tomé un video donde se ve que abren la ventana de un segundo piso, se asoman y vuelven a cerrar, nunca me abren”.
Desde el 3 de julio que ocurrió la sustracción, Gabriela contó que ha intentado buscar vía telefónica a Rodrigo, pero no hay respuesta porque él le bloqueó los mensajes y llamadas, lo mismo que hizo Graciela, la abuela.
“Lo único que pido es que me dejen ver a mi hija, que me digan dónde está, que me regresen a mi hija, temo por la integridad de Lía porque yo no sé cómo está”.
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