Pachuca.- No hay medicina para diabéticos, hipertensos y personas con enfermedades crónico degenerativas, así lo informó la titular de la Secretaría de Salud, Zorayda Robles Barrera, al tiempo que reconoció que “el abasto va lento”.
Tras el ingreso de Hidalgo a la compra consolidada de medicamentos, el estado no ha podido regresar a las cifras que manejaba en 2019 y 2020, en lugar de incrementar, disminuyó el porcentaje, ello con base en datos ofrecidos por la titular de la secretaria de Salud, Zorayda Robles Barrera y los arrojados en el informe de Transparencia en Salud 2019-2020, realizado por Cero Desabasto.
De acuerdo con la secretaria de Salud, el abasto de medicamentos y material gastable “ha sido lento pero progresivo”, de tal forma que actualmente se tiene una cobertura de entre 30 y 60 por ciento, mientras que en 2019, la cobertura era de 77 por ciento y en 2020, del 83 por ciento, con base en los datos de Cero Desabasto.
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Zorayda Robles comentó que llevan a cabo un recorrido por las comunidades en centros de salud y clínicas de segundo nivel, ello con el objetivo de generar un informe, pero no sólo escrito, sino desde los espacios.
Reconoció que hace falta medicamento, y lamentó que aún no se haya logrado alcanzar “el abasto que quisieran, lo llevamos lento pero progresivo”.
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Aseguró que los medicamentos que están en desabasto son los que ocupan en su mayoría las personas con enfermedades crónico degenerativas como las que padecen diabetes, que “es el grueso de la población”.
Para lo que sí hay medicamentos es para cuestiones de Urgencia, “sí los tenemos, corresponden al proyecto Tiempo, corazón y vida, la primera causa de muerte en Hidalgo y en México es el infarto al miocardio y hay abasto suficiente de trombolíticos”.
Cuando se trata de enfermedades raras o situaciones de urgencia “estamos en contacto con la red hospitalaria y en constante comunicación para salvar vidas, de un órgano y de una persona”, expresó.
Hospital general
Zorayda Robles reiteró que el Hospital General que construyó la pasada administración aún no ha sido recibido por la Secretaría de Salud, pues presenta deficiencias que se deben subsanar para poder utilizarlo, tales como “correcciones mayores, que haya agua potable, el drenaje que no hay, no sólo en el hospital general, sino en la periferia”, detalles para los que se calcula se requieren por lo menos 500 millones de pesos.
sjl