¿Quién atiende la sed de los hidalguenses?
La distribución del agua para Hidalgo es un problema que va creciendo. En diferentes regiones del estado empiezan a surgir inconformidades con la Comisión Nacional del Agua (Conagua), que se encarga de administración del recurso natural. La semana pasada habitantes de Zimapán, alcalde y regidores incluidos, se manifestaron en la Ciudad de México contra la construcción del Acueducto III, proyecto que prevé la sustracción de agua de la presa Zimapán —que alimenta la hidroeléctrica Fernando Hiriart—, para llevarla a la Zona Metropolitana de Querétaro. La otra inconformidad está en el Valle del Mezquital, donde productores han empezado a reclamar una distribución inequitativa de agua para los canales de riego, aseguran, las aguas grises —que antes nadie quería— están resultado un buen negocio para los campos del Estado de México, lo que ha ocasionado una disminución de los volúmenes que llegan a Hidalgo.
Y hablando de agua
En el municipio de Tepeapulco surgieron rumores de que alguien dentro del gobierno municipal aprovechó la falla mecánica del pozo 6 para vender pipas a la población que se quedó desabastecida durante el fin de semana, aunque la presidencia municipal había anunciado que el servicio sería gratuito. La inconformidad llevó a algunos vecinos a cerrar la carretera Ciudad Sahagún-Zapata. Los quejos señalan que la alcaldesa Marisol Ortega prefirió gastar un millón de pesos en los festejos decembrinos que adquirir equipamiento para el buen funcionamiento de la infraestructura hidráulica.
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